3er paso para manifestar lo que deseas

Hemos concluido con los conocimientos básicos que son:

  1. La repetición
  2. La unidad
  3. El tiempo
  4. La vida (un reflejo de tu interior)
  5. La meta
  6. El camino y la brújula
  7. La voluntad
  8. La rendición
  9. El perdón
  10. La lección final
  11. Tu centro

Todos ellos son ingredientes qué al entenderlos, te permitirán cocinar o manifestar lo que desees. Si algo que quieres, no se manifiesta es porque algo de aquí no estás aplicando. Siempre hay un espacio de tiempo, en el que pides y manifiestas. En ese espacio es crucial siempre mantenerte en tu centro. Sabiendo que en verdad es lo único verdadero e importante, pues es la fuente de todo.

En sí los pasos que he explicado hasta ahora, para manifestar son:

Paso 1: Dejar de reaccionar a tus 5 sentidos

Paso 2: Conocer nueva información, que son los 11 conocimientos

Después de entenderlo, podrás darte cuenta que para manifestar lo que deseas necesitas aceptar que la realidad no es sólo lo que tus ojos ven. Sino que todo lo que surge en el plano físico, viene de aquello que no se ve, y que somos: energía y conciencia.

El 3er paso para manifestar lo que deseas es tener claro lo que quieres y mantener un estado emocional de plenitud y silencio (paz). Soltando eso que anhelas. Pidiéndolo NO desde un estado de carencia. Sino sabiendo que ya eres todo, y que sería divertido si tuvieras x o y cosa. Pero que igual si no sucede, no hay problema, pues te sabes completo y feliz.

Por favor recuerda que este plano físico es como un juego de disfraces. Donde tu decides cual ponerte: el de carencia o el de plenitud. Y que además, sólo anheles la meta NO física, que es recordar que la fuente de amor y abundancia eres tú. Lo demás son adornos que la vida responde a tu sentir.

Lo que se manifiesta sólo es la voluntad de la vida y tiene un fin superior para recordarnos que ya somos todo y tenemos todo. Si tú te aferras a lo que tiene forma, entonces en automático algo pasará para que recuerdes que afuera no es, sino sólo un reflejo de tu interior.

Nuestro único libre albedrío es cómo ves o interpretas aquello que sucede.

Entonces es: pedir x cosa en el plano físico y después desapegarte de la forma física, y comenzar a regocijarte en ti: en tu fuente de amor, paz y dicha. En esa medida, llegará a ti. Y la razón es que existe una ley que indica que todo lo que eres, atraes. Si te sientes bien, desde ahí ves las cosas bien. Si te sientes necesitado, no habrá nada que llene tu vacío. Y sólo sucederán cosas que reafirmen tu vacío.

Cuando estamos viviendo situaciones que no nos gusta, es porque hemos olvidado que afuera no hay nada que nos brinde eso que deseamos. Sólo es una pantalla, una proyección que nunca podrás poseer. Es tan efímera y fugaz qué al tenerla, dura tan poco que vuelves al vacío porque sólo era una imagen mental.

Cuando algo en tu presente no te gusta, no tiene que ver con la forma física en sí. Sino con la manera en la que estás decidiendo ver esa forma física.

Aquí siempre hay dos opciones: visión de amor o visión de miedo.

Si te mantienes en la primera, estarás sembrando nuevas situaciones amorosas y acorde a lo que realmente deseas.

En cambio, si eliges la segunda, tu sentimiento de preocupación, ansiedad, control o enojo; sólo traerá más situaciones similares.

Tu visión lo es todo. El futuro no existe, todo es aquí en el presente.

Hagas lo que hagas, hazlo porque hacerlo te hace feliz; y no por esperar que en el futuro tendrás la recompensa.

Así que cuidado y te lo repito: Lo que hagas, hazlo porque te hace feliz en el momento de hacerlo; y no porque estés esperando algo en el futuro. Pues es imposible vivir en el futuro.

Si no eres feliz en este instante; no habrá nada que te lo brinde en un tiempo al que no puedes ir. El futuro sólo es un pensamiento.

Entonces, la parte medular de los pasos para crear, es tu capacidad de estar aquí y ahora, siendo feliz hagas lo que hagas. Algo que no es sencillo de hacer porque la mente, que sólo vive en el pasado y futuro; nos trae aplazando esa felicidad.

Una herramienta que te servirá muchísimo y que prometí en el blog pasado, es la MEDITACIÓN.

Ahora si te lo voy a platicar en el siguiente blog.

Para recordar:

Vive el momento presente, eso implica silencio en tu mente. No pensamientos.

Encuentra lo que quieres, primero en ti.

Recuerda que afuera sólo es una proyección de tu estado mental.

Ariadna Salazar León